martes, 30 de noviembre de 2021

ARTESANÍA EMOCIONAL

 

ARTESANÍA EMOCIONAL

 

Quiero ser la talladora de mis emociones

La haceedora de mis días plenos

Someterme al dictamen de mi ley consciente

Que los vendavales apenas toquen mis hojas,

para despertarme y sacudirme del tedio.

 

Quiero ser nube blanca y lluvia cristalina

La gota que moja tu cara y dibuja tu sonrisa

Socavar el estruendo de tu risa,

cuando las nubes grises envuelvan tus ojos

Cuando el dolor sea el fruto amargo que te alimenta.

 

Quiero que mi alma sea laguna inmensa,

de peces alados volando en tus brazos

Manantial de amor mojando tu vida

La copa de palabras que te invita,

a cubrir tu ceño en manantiales de paz.

 

Toma mis mejores espigas viajeras,

las que alimentan los panes de altares en pena

Toma mis manos abundantes en caricias,

brotadas del hondo surco de mis venas,

de mis cielos vestidos en celestes arenas.

 

Dame de tus glóbulos blancos y rojos,

los que más amor segregan

Dame el néctar de tus endorfinas y serotoninas

el vino rojo de tus dopaminas y oxitocinas

Dame de beber las cuatro esquinas de la felicidad…

 

Gudelia Cavero Hurtado

 

 

domingo, 28 de noviembre de 2021

martes, 2 de noviembre de 2021

Ingrediente secreto/Jesucita Peters

 

Fecha: 28-10-2021

Autor: Jesucita Peters Salcedo


“El ingrediente Secreto”

A lo largo de nuestra existencia vamos descubriendo infinidad de ingredientes que sazonan nuestro transitar por este plano y nunca perdemos nuestra capacidad de asombro.

Ingredientes que nos inundan el alma de amor y ternura y nos barnizan la piel con el dulce de la miel para hacernos la vida más agradable; hay otros ingredientes que aunque queramos no tenerlos están presentes, como las piedras que me hacen caer y no las puedo evitar aunque mi cuerpo se estremezca como el moriche al viento en una noche de tempestad y los truenos y los relámpagos me hacen recordar que siempre van juntos, sin embargo, las piedras siempre estarán presentes.

Este siglo nos ha traído muchos ingredientes nuevos para saborear y para aprender de ellos, pienso que uno de los más importantes es el ingrediente de “la incertidumbre”, poniendo a toda la humanidad en el  año 2020, a no saber que podíamos esperar, sin distingos de clases, colores, razas, ricos, pobres todos por igual, remando inexorablemente en el mismo mar,  pero en distintas balsas, sin saber hasta cuándo estaríamos remando. Este es un ingrediente que nos marcó a todos, pero no sé si fue por igual, lo que sí puedo decir es que de alguna forma lo hizo, quizás para hacernos más reflexivos sobre nuestra existencia y valorar lo que antes dábamos por sentado, entre ellos el abrazarnos y saludarnos, un ejemplo entre muchos.

“La distancia” otro ingrediente, cuánto aprendí con ella, no podría enumerar todo lo que atesoré cuando estuvo en mí despertar, en mi mañana de nostalgia, en mi ocaso de pensamientos alegres y coloridos para no ensombrecer ante la noche en donde no ilumina la luna llena, si distancia, que quizás me permitió idealizar los afectos para seguir llenando el autobús de mi vida de lo que  me nutre para ser feliz.

La Distancia vino acompañada de otro ingrediente, ”La soledad”, que aprendí a disfrutarla y aquilatarla en su justo valor, pues me enseñó que tenemos herramientas emocionales que nos permiten crecer como persona ante las adversidades.

Hoy día siento que mi vida ha vuelto a saborear otros ingredientes secretos y maravillosos como :la ternura, la aceptación, el desapego, el agradecimiento, la nobleza y muchos otros que sólo podría obtenerlos por el ingrediente secreto más maravilloso “el amor incondicional”; este es el ingrediente secreto que fortalece y llena mi alma todos los días al despuntar el alba y ver y disfrutar los rayos del sol acariciando mi piel y mis sentimientos más profundos para ser más compasiva y empática  con el otro, lo que me permite sentirme realizada como persona. Es una sensación amable, sencilla, tranquila, respetuosa, me encanta sentirme así.

En el transcurrir de nuestras vidas siguen habiendo muchos ingredientes secretos por descubrir y sé que tomaré el que mejor aderece mi existencia para dar y recibir lo que conlleve al bienestar.

Pero cuando hablamos de ingredientes secretos, no podemos dejar de lado esos ingredientes culinarios que formaron parte de mi infancia y de la tradición familiar a través de los alimentos preparados en familia, esos que nutren mi memoria y me retrotraen  a ese disfrute de sabores y olores dejando una huella indeleble a nivel de mis sentidos y que forman parte de mí, como la hoja adherida al tallo de la planta para crecer y brotar la flor más maravillosa del  jardín.

Quizás uno de los olores que llevo impregnado a mi memoria,  es la jalea de guayaba que hacía mi abuela; como no recordarla si nos producía tanto disfrute entre los primos que pasábamos vacaciones con ella.

Otro ingrediente secreto era la elaboración del dulce de lechosa que impregnaba la casa con ese olor a canela, clavo y papelón que delicia cuando mamá lo hacía, pero no se queda atrás el arroz con coco; hasta el momento no he conocido otro arroz con coco como el que hacia mi negrita amada. Otra tradición, mamá acostumbraba hacer tortas los días sábados para comerla el domingo en familia con leche, ¿que tal?. Pero quizás la mayor de todas las comidas que llevaban infinidad de ingredientes secretos y modos de prepararlas eran las multisápidas hallacas que hoy día he aprendido muchos secretos para hacerlas  y se lo estoy transmitiendo a mis hijas, aparte que contribuye su elaboración a la unión familiar y a buscar siempre nuestro ponche crema y algo más picantico junto con las gaitas, para recordar nuestra tierra amada  ya que estamos lejos pero siempre presentes.

Hoy día en otros horizontes, estoy aprendiendo de los ingredientes que trae cada estación del año, yo no había disfrutado tanto el otoño. Para mí ha sido magnificente todos los ingredientes que trae consigo, entre ellos el cambio de color de las hojas de los árboles y plantas que van desde los tonos de amarillos, naranjas, rojos, morados; es un arcoíris de colores que contrastan hermosamente para mi deleite, lo estoy disfrutando por demás­; ya empezaron algunos árboles a desnudarse cayendo sus hojas multicolores, dejando una alfombra de hojas para recibir el invierno con el frío característico.

Bueno amigos aprendiendo de todos los ingredientes nuevos e incorporándolos a este proceso de adaptación a nuevas costumbres, nuevas formas de hacer las cosas, miradas distintas de un mismo hecho. En medio de todo, somos muy afortunados por tener esa capacidad de aprendizaje constante. Agradecida por ello.