lunes, 28 de noviembre de 2022

Carta a los escribidores/ Irma Wefer

 

Caracas, 27 de noviembre de 2022

Mis muy queridos escribidores:

Hace tiempo nos hacemos una pregunta que tiene que ver con nuestro sentido de pertenencia:¿qué nos mantiene unidos?  La respuesta es evidente: compartimos el ADN de la psicología positiva. Sumado a nuestra razón de ser: la creencia de que “escribir hace bien”.

Lo que consolida a un grupo es la confianza y ésta viene ligada a la identidad de en quién se confía. La pregunta surgió sola ¿Quiénes somos?

Para ver claro necesitamos un cristal limpio, diáfano, por el que entre la luz y se pueda ver más allá. Se me ocurrió que eso somos: cristales multicolores de honestidad y cariño unidos en un caleidoscopio que se mueve al ritmo de alegrías y tristezas, dudas y certezas, erratas y aciertos, risas y encuentros. Gente bonita empeñada en construir la mejor versión de su ser en la fragua de su hacer cotidiano.

Vivimos en un mundo donde abunda el ruido para no oír los miedos que habitan en el silencio. Somos  palabra amable y sosegada en el bullicio del mundo. Y el día que la pandemia obligó al mundo a detenerse y adentrarse en los lugares inciertos del silencio, entramos en desacato y nos hicimos palabras de coraje y resiliencia.

Somos espejos que nos reflejan.  Cortázar lo descubre  en una maravillosa frase: “para verme tenía que mirarte”. Encontrarnos en  el ser y en el quehacer del otro. Es como trasegar el mismo vino en dos cuerpos diferentes. Puede que nos acerque y a veces nos aleje, pero al final del día es un vino que se hace familiar.

Somos presencias transformadoras. Hay presencias que iluminan el alma. Presencias que son compañía y apoyo, que expanden nuestra mirada del mundo al sumar la suya, que nos hacen ser personas más abiertas y tolerantes. En resumen: más generosas. Citando a Francois Mauriac: “Somos moldeados y remodelados por aquellos que nos quieren.”

Somos los locos que, a contracorriente, comparten la idea de que el amores  líquido como el torrente de un rio, con su fuerza, su flexibilidad, su continuidad y constancia. Fluye y no lo detienen los obstáculos, porque el amor es resiliente. Sólida solo la roca rígida y dura.

Somos hombro para apoyar la cabeza cuando los itinerarios no nos son favorables. La amistad, la solidaridad y la compasión son retoños de nuestros huertos.

Somos  la capacidad de asombro de ese niño travieso que sigue descubriendo el mundo. Con inocencia en la contemplación, bondad en la intención y sabiduría en la interpretación. Discernimos desde el entusiasmo y acogemos con osadía los rastros de nuestra historia con la ilusión de hacerlo siempre un poco mejor.

Somos cascebeles de risas, a veces espontáneas e inocentes; a veces, inteligentes, agudas, perpicaces. Y siempre con el irrevocable sello de la libertad.

Somos  iridiscencia de fortalezas que se hacen compañeras de camino. Salimos a su encuentro a diario porque sabemos que ellas nos marcan la línea fronteriza entre lo que soy y lo que quiero llegar a ser. Efecto mágico de la voluntad que se hace hábito.                    

Somos tejedores de bienestar. Empeñados en hacer del PERMA rueca donde se anudan los hilos de nuestras experiencias.   Entre nudo y nudo, sentimos pasión por  mostrar a los otros su capacidad para tejer, desde el bienestar, su propio tapiz.

Somos los escribidores, compartimos el amor por las palabras que nos nombran, nos cuentan, nos descubren y nos salvan. En cada escrito compartimos la ruta  y el refugio.

Compartimos el difícil oficio de estar vivos. La fe en que la vida es un milagro que se revela cada día. Y juntos podemos verlo con más claridad.

Se les quiere y admira,

Irma

domingo, 27 de noviembre de 2022

Tema Nov 2022/ Carta a un escribidor


Carta a los escribidores

Nov 2022

Hoy, el bosque amaneció sin nubes. Han sido muchos meses de lluvia constante lo que ha hecho que algunos animales hayan debido migrar. Se espera concurrencia de la fauna silvestre, ya que la abeja y la gaviota han convocado a una reunión. El tema es un poco lo que somos, lo que significamos unos con otros. Yo creo que la abeja lo aplica de su gran aprendizaje de vida en colmena y en la fabricación de la miel; es por eso que se ha propuesto a preparar comida para tal magno evento. La gaviota por su parte, ha escogido la parte del bosque que llega al mar, un poco como para hacerles fácil la llegada de los que allí hacen vida. Ella vive pendiente de los demás y los escucha.

Cerca del mar, en la zona frondosa del bosque, donde el viento se vuelve metáfora al silbar entre las hojas, habita la golondrina. Es famosa por tejer nidos; ha ayudado a muchos, a seguir tejiendo aun cuando se encuentren vacíos. Las gaviotas, al igual que otros pájaros, suelen emigrar en invierno y hacen nidos a su regreso, en el verano. La abeja, la gaviota y la golondrina entonces, se proponen a reunir a una cantidad de habitantes de la jungla, para conversar de sí mismos, celebrar la vida, abrazarse y degustar. 

–Es una ocasión especial”, dice la abeja- “pues tendremos a la lechuza de invitada”-, aclaró.

 Ella vive entre volcanes, pero ha aprovechado la migración de golondrinas en su regreso, para regresar también. (La golondrina sabe, que el nido de los pichones de la lechuza ya crecidos, esperan la llegada de un nuevo integrante)

En el grupo hay pares, aunque no son parejas. Se parecen al arca (de Noe) no a Arcángela. Por ejemplo, tenemos dos Guacamayas, una que gusta del chocolate, lo que hace que sus colores la acerquen a la luz del sol, y un guacamayo multicolor, conocido por su canto, por su corazón y su amor a otros. Pero vive en otro bosque. Hemos aprendido a que de todas maneras se encuentre entre nosotros. Algunos lo llaman de “corazón a corazón”. También hay dos gaviotas, pero una de ellas, al emigrar, se quedó lejos. Al igual que con el guacamayo, hemos aprendido a comunicarnos con el corazón.  También hay dos tigres, pero de ellos hablamos mas adelante…

Se espera  que llegue la ardilla, inquieta, alegre, empática, cargada de frutos secos y nos explique porque son buenos para la macrobiota, que es una especie de ejército de seres que conviven en nuestro cuerpo. El tigre bajará de lo alto del bosque, donde convive entre nubes, asombrando toda ves, con la capacidad que tiene en hacerlo; estará en alma y corazón, la mariposa Monarca que también aprovechó la migración de la temporada para ir a otro lugar; ahora sus migraciones son internas, con sus hijas y nietos. El resguardo del grupo estará en las patas de los más fuertes:  el toro venido de lejos con su cuatro a cuestas, recordándonos lo importantes que somos; el siempre presente, el Pastor ovejero, el que observa y comenta aunque no te guste, pero entendiendo que escucharlo nos hace bien, y por último, el gran tigre de Bengala, (también tenemos dos) el de colores, el que se ocupa de otros animales en desgracia y que tiene como propósito, hacer que todos tengamos nuestro propio nido, lleno o vacío, pero que sea un lugar querido para habitar.

De los que habitan en el mar o dentro de él, esperamos al pelícano, una noble ave que abraza a los animales del mar con su noble alma; y al delfín o delfina que nos recuerda siempre la importancia de las organizaciones positivas.

Por último, vendrán los de la logística: la luciérnaga amorosa que nos alumbrará si cae la noche y hasta el día siguiente, con una luz interna, profunda, intensa; la canaria que entonará sus cantos y nos hará reir con sus ocurrencias, también el caballo alado que vendrá de lejos con su prosa mágica a traernos ilusiones y encantamientos; y por último y no menos importante pues es quién escribe, el reno, que es capaz de convocar y que trata, en lo posible, lograr que estemos juntos.

Así somos, seres diversos, con distintos objetivos y metas, con distintas ambiciones y lugares para habitar. Somos los que no emigramos y los que si lo hicieron, somos los que van y vienen, pero regresan; somos, aquellos que a pesar de los que nos pasa, ya sea en salud o en circunstancia, seguimos adelante y no desfallecemos. Somos, los colores del arcoíris, somos el mar, el aire, el viento, el sol, la luna, el agua, y la tierra o el fuego y el aire. Somos esa fuerza interna que conseguimos en la metáfora de cómo nos ven y como nos vemos, esa fuerza interna que nos conecta con la naturaleza y con la espiritualidad.

Somos, porque nos respetamos, nos acompañamos, nos escuchamos y somos por sobre todo y todas las cosas, vicisitudes y circunstancias,  amigos del alma...

Alberto

Carta a un escribidor/ Tibaire García

 

Caracas, 27 de noviembre de 2022

 

Carta a un escribidor

 

CONFIANZA PERSONIFICADA

 

Qué buena fue esta idea. Escribirle a un escribidor. La ocasión me lució oportuna para agradecer, a saber de lo bien que hace dar gracias, mas esto mismo me hizo ardua la tarea, porque mi corazón está repleto de gratitud y amor con todos.

Para mí eres de esos seres que yo llamo bonitos. No, se me hace corta esta palabra. ¡Francamente eres preciosa!

Ese abrazo en que te entregas. Esa sonrisa tan hermosa. Una humildad y sencillez que no se encuentran fácilmente. Graciosa siempre. Ecuánime  absoluta. Llevas puesto el respeto, la delicadeza con el otro, la generosidad y la nobleza.

Sé que puedo confiar en ti.

 Sana, hermosa…

Casi todos, sino todos, te hemos tocado la puerta para que tú hurgues en ese líquido rojo que nos recorre el cuerpo.

¡Gracias por tanto, mi amada!

Tu sanota, tu robusta

LA PERTENECEDERA by Cesar Yacsirk

 

(El de la izquierda es un tipo de apellido raro)


Últimamente he leído en las redes un sinfín de declaraciones acerca de pertenecerse o algo así. Alegre e irresponsablemente entregan su titulo de propiedad sin hacer explícitos los términos del contrato.

Pues no!!! Es hora de hacer la declaración mayor, diáfana y enfáticamente. La madre de todas las declaraciones.  ES MIA y YA!!!

Hace muchas lunas la vi nacer profesionalmente. Yo aún no era gente grande tampoco y me paseaba por los pasillos de la escuela de psicología de la UCV por los años 80. Creo que hasta clase le di. Deambulaba con mi chupeta.

Muy poco tiempo después le acompañaba con su chico de turno. Me hice su amigo para estar cerca de ella. Fue tanto, tanto, que lo nombre padrino de mi boda. Para nada pero bueno…esa es otra historia.

Fui testigo de su primera caída en su padecimiento recurrente. Después de la visita permitida en el centro de salud, nos íbamos (su partner y yo), a ver el partido de beisbol disponible. Tenía que garantizar que tendría un comportamiento adecuado. Esa también es otra historia.

Estuvo en mi unión civil, yo estuve en una de sus caídas en su mudanza a San Antonio y La Miranda. Me despedí de ella espiritualmente desde Colombia y fui feliz al verle presencialmente a mi regreso.

La he visto amar, extrañar, reír y casi odiar. Digo casi…ella no es capaz de eso. Aunque puede usted ver algo cercano si se le atraviesa un motorizado durante su conducción.

Hemos viajado, bailado, comido, reído y llorado. Esta última solo ella, porque como todos sabemos: Los hombres no lloran!!

Entonces, Ningún, ningún. No se vistan para esta fiesta.

ME PERTENECE A MI

 

Cesar Yacsirk

Club de Escribidores de Caracas.

Noviembre 2022


jueves, 17 de noviembre de 2022

CEC tema de noviembre 2022

 


Noviembre 2022

Domingo, 27 de noviembre
Hora: 10. 30 am
Lugar: por definir
Host. Doña Tibi y Doña Hened
G del PERMAG:  por la Chef  Hened Abraham: "comida árabe"
Llevar hielo, bebidas y postre

-Tema "Carta a un escribidor"

-Lugar:  por precisar.
RSCVP