QUE LE DIRÉ A DIOS CUANDO ÉSTE CAMINO TERMINE
Desperté con la vida
Clavada en una estaca
Con mis sueños
enredados en espinas
Una oración sacudió
mi delirio
Paró en seco el
martirio
Y su voz en catarata
de ecos
Preguntó suave y
cercana
Que hiciste con la
vida que te di
GCH
CUÉLGATE EN TU PROPIA
VIDA
Cálzate tus propios
pasos
Lame tus heridas y tu
dolor atrincherado
Embriágate con tus
jugos agrios
y mastica tus crudas
yerbas
Engalana tus ojeras con
el ruido de tu insomnio
Baila en tus trampas
vitales
Hasta que se hagan
mortales
Cuélgate en tus
propios errores
En tus sueños
cabalgando lunas de lagunas
En tus ayeres de pesares
y resplandores
Mírate en el espejo
gris
y tú… cristalina,
abre tus cortinas a
la luz divina
Sacude tus sueños
negros
los del carbón
envejecido
No cargues el peso de
otras vidas
No flageles tus
noches,
con dolores ajenos y
heridas
No saborees desaciertos
grises
No cargues el peso
muerto de otras vidas
No pretendas morir
muertes ajenas
No vivas en el ocaso
de otros ocasos
No seas el ojo siniestro
de errores ajenos
Porque tu misma eres
un error camuflado
GCH
LA CHAQUETA DE ABUELA
Una noche fría
la chaqueta de abuela
Voló a su espalda entumecida
Sus hilos cetrinos
Su piel fina y
plisada
atizaron calor,
en las venas de mi
niña amada
La chaqueta de abuela,
decidió quedarse
colgada para siempre,
en la tierna espalda
de mi nieta
Para protegerla del
frío de la vida
Para ser su
confidente
La tela fina que a su
lado camina
Morada y coqueta
Irá colgada en su
frágil figura
En sus brazos estarán
mis abrazos
Envolviéndola con mi
poema
Con el amor sublime
de la ausente y
peregrina abuela
GCH
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