martes, 9 de febrero de 2016

No hay vuelta atrás…………..


Entrando en la edad de la curiosidad es decir era tan solo un niño cuando fácilmente entendí la importancia de saber y entender la maravilla de lo que significaba que era aquello que llamaban CENIZAS .
Debo ser sincero y honesto al relatar este escrito, si bien es cierto que vengo de un hogar católico donde se celebran bautizos, confirmaciones, rezos , novenarios y otras costumbre las cuales no me quedan aún muy claras, al punto que aun confundo y no sé muy bien quien es Jesus y quien es Dios o Jesucristo y no sé quién es el espíritu santo o el hijo, ni quien nació primero o después, inclusive quien resucito al 3er día, en fin ese no es el punto principal, igual creo en un DIOS y estoy seguro que el entenderá mi ignorancia al respecto y espero que ustedes también.  Ha sido un tema complejo en mi vida, a pesar de que hasta monaguillo fui, pero fue solo que por simple curiosidad.

Lo cierto es que quizás mi primera experiencia de cenizas debe haber sido en una iglesia pues si sé que en algún momento me colocaron algo en la frente que hoy creo entender que fue cenizas, esto fue en una celebración religiosa aunque no lo recuerdo muy bien, pero lo cierto es que a lo largo de mi experiencia de vida me ha llevado a toparme con muchas cenizas de diferentes tipos, pero es solo hasta hoy que he podido reflexionar y todo me lleva a pensar en un ANTES y un DESPUES………..en un AQUÍ Y AHORA.

DONDE HUBO FUEGO CENIZAS QUEDAN………..Siendo curioso y niño, mi padre, tíos y primos organizamos un viaje al Cerro el Piache en Porlamar Edo Nueva Esparta a ver los restos de un avión que días atrás había impactado contra la montaña,  allí me encontré con cenizas de todo tipo, cargadas de energías impactantes y entendí que No había vuelta atrás, esto fue una lección de vida que más adelante me enseñaría a usarla como una analogía de crecimiento.

RETROCEDE A LAS CENIZAS………sigo siendo curioso y esta vez ya un poco más grande pero también más curioso era perteneciente al equipo voluntario de Bomberos forestales y con las ganas así como la voluntad me enfrente a un incendio forestal que desde mi visión y experiencia yo tenía el poder de controlarlo con un simple bastidor de caucho que se usa para aplastar el fuego, monte adentro pude sentir como me empecé a hundir entre la maleza que me lanzaba hacia un corte empinado cerro abajo ( entiéndase farallón ) no conforme con esto, que para mí ya era suficiente problema que resolver,   de repente  la dirección del viento cambio y las lenguas de fuego voraz que iban delante de mí entiendo se molestaron con mi osadía de querer apagarlas y ahora eran ellas las que me querían consumir devolviéndose hacia donde yo estaba batallando contra ellas, rápidamente repase mentalmente mi entrenamiento y recordé . CENIZAS, CENIZAS, CENIZAS, retrocede a las cenizas todo aquello que se convierte en cenizas no se puede quemar por segunda vez, así lo hice, brinque, salte, me encarame hasta que logre verme envuelto entre cenizas, pero seguro que el fuego no me alcanzaría ……..allí entendí quien tenía el poder. Mas nunca regrese a enfrentarme con la naturaleza.

Volviendo a un presente real, CENIZAS son la analogía perfecta en el entendimiento que lo que paso paso, que las cenizas son el pasado y aquello que puedes ver, sentir y disfrutar es tu aquí y ahora, CENIZAS SON CENIZAS……….

Luis E. Semprun Van Grieken

1 comentario:

  1. Luis excelente analogía, las cenizas son el pasado...pero también volver a las cenizas solo para protegernos, desde los recuerdos felices.

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