sábado, 16 de noviembre de 2024

CEC Tema de noviembre de 2024

 CEC Noviembre 2024

Tema: "la distancia es como el viento"

Host:

Doña Ivette y Don Alberto

Domingo 24 de noviembre de 2024

10 am

Vìa Meet


y nos volvimos ellos/Marìa Elena Garassini

 “Y nos volvimos ellos”

Siempre allí presentes, modelando comportamientos, decisiones, propuestas,

posturas, rutinas, entretenimientos, relevancias, asombros, inquietudes,

tranquilidades… en fin una forma de abordar la vida, esa vida que nos toca vivir.

Desde la tierna infancia alguien nos alimenta, nos viste, nos pasea, nos enseña,

nos acompaña, nos educa, nos hace surfear las olas de la vida con un tipo de

tabla particular y con experiencias de manejo de olas de diferente tamaño e

intensidad. Nuestros progenitores son esos primeros adultos significativos ,“role

model”, que inicialmente van tomando decisiones por nosotros, después tomarán

decisiones con nosotros y finalmente respetarán, valorarán o rechazarán

nuestras decisiones. Hacer una retrospectiva de ese viaje con ellos, es un ejercicio

de memoria emocional selectiva, evocando situaciones variadas que, por alguna

razón, fueron importantes para nosotros.


Mi madre me evoca situaciones de meticuloso cuidado, asociado a rutinas y

rituales que me brindaron seguridad como niña, como adolescente, como joven,

como pareja y finalmente como madre y abuela… y entonces, en algunas cosas,

me volví ella.

Mi padre me evoca situaciones de momentos especiales, cuidados especiales,

actividades especiales, fines de semana, vacaciones, que me brindaron seguridad

como niña, adolescente, como joven, como pareja y finalmente como madre y

abuela. No puedo dejar de nombrar a mi padre como “rol model” de profesional

(médico gastroenterólogo) y persona que es curioso, estudioso y practicante del

cuidado personal y la salud integral propia y ajena… y entonces, en algunas

cosas, me volví él.


Cuando vamos creciendo empiezan a aparecer otros significativos en nuestras

vidas. Un desfile de familiares extendidos como tías y tíos, abuelas y abuelos,

primos y primas empiezan a aparecer y nos acompañan en diversas situaciones

como encuentros familiares, de celebración de diversos eventos, que nos modelan

mucho el cómo divertirse y compartir los espacios con otros, para atenderlos o

dejarse atender, conversar , comentar, reír o llorar. Aunque estuvieron todos allí,

quizás las más significativas sean mis abuelas, de quienes aprendí a servir y a

consentir a otros… y entonces, en algunas cosas, puedo haberme vuelto ellas.

El mundo educativo, que inicia desde el preescolar, la primaria, el bachillerato, el

pregrado, postgrados, y múltiples formaciones profesionales, han estado llenas de

otros significativos que se convirtieron en maestros, modelos e inspiración en mi

vida. Puedo recodar a mi maestra María Auxiliadora de tercer grado, modelo de

preocupación genuina por sus alumnos, su aprendizaje y su bienestar, también

recuerdo a la profesora Ligia, de historia universal en bachillerato, modelo de

creatividad para hacer vivir a sus alumnos los sucesos de la historia. Llego al

ámbito universitario y recuerdo a la profesora Alida Cano, modelo de integración

de la vida familiar y profesional, de la profundidad y adecuación para atender y

estudiar el desarrollo humano, así como de cercanía, cariño y hasta la actualidad

,“hermosa amistad “. 

Recuerdo también una formación en terapia familiar que nos

facilitó el Dr. Andrés Nazario con Fundana, en convenio con la UNIMET, quien fue

un verdadero “role model” para una profunda comprensión y aceptación de la

diversidad y el abordaje sistémico de personas, parejas y familias. Recuerdo otro

gran maestro, el Dr. José Arturo Luna, director y profesor del Instituto Colombiano

de Logoterapia y Análisis existencial, de quién aprendí todo lo que se de ese

maravilloso modelo de comprensión del hombre. De alguna manera, en algunas

cosas, me volví ellos, o por lo menos eso quisiera.


Este escrito, que se convierte en un homenaje a los otros significativos en mi vida,

quienes fueron fuente de inspiración y aprendizaje, y “me volví ellos” o más

bien, “me volví una combinación de ellos”, ha sido un gratificante viaje por mi

vida llena de situaciones y personas afortunadas. De nuevo termino otro de mis

escritos con el mantra “gracias a la vida que me ha dado tanto”.


María Elena Garassini

y nos volvimos ellos/Jesucita Peters

 Autor : Jesucita Peters S.

Fecha: Octubre 2024.

Tema:

“Y nos volvimos ellos”

En el transitar de nuestras vidas vamos acumulando experiencias y vivencias que

de una u otra forma moldean maneras de comportarnos y de reaccionar ante los

eventos, aspecto que consideramos muy propios, pero valdría la pena preguntarse

cuantos nos pertenecen en su totalidad y no fueron marcados por el aprendizaje

que construimos al lado de nuestros progenitores o de aquellas personas que de

una u otra manera admiramos, asimilando de ellos formas de expresión,

preferencias gastronómicas , gusto por ciertos aromas que nos son familiares,

formas de vestir, lugares que nos gustaría conocer, entre otros.

Pero detrás de esto también está la genética que marca nuestros rasgos, color de

ojos, contextura, tipo de pelo y que de una u otra manera nos identifica con

nuestros padres y antepasados.

En función de lo antes planteado recuerdo una vez estando transitando por los

pasillos de la Escuela de Psicología de la Universidad Central de Venezuela, vi

una joven aproximándose hacia mí, que pude identificar de quien era hermana sin

haberla conocido antes, a pesar de que no se parecía físicamente a la que yo

conocía, no obstante, con sólo observar su gesticulación, caminar y tono de voz

me lo permitió.

Pues sí, nos parecemos más de lo que imaginamos a nuestros padres.

Rememorando a mi mamá en su edad adulta, un buen día la veo haciendo el


asado negro cómo lo hacía mi abuela, recuerdo con tanta gracia cómo se ponía

una pañoleta en la cabeza, de la misma manera como lo hacía mi abuela cuando

se dedicaba a esa faena, indudablemente el aprendizaje adquirido es innegable,

aunque también hay parecidos heredados.

Hoy más que nunca recuerdo a la negrita, mi madre, ya con varios años encima,

sin embargo, no perdió el de siempre verse bien, era muy coqueta para su

vestimenta y el arreglo de su cabello y hoy yo transitando por sus años, mis hijas

me dicen cada vez te pareces más a mi abuela mami y en realidad yo no lo veo,

pero así me perciben; indudablemente nuestros padres dejan huellas indelebles

en nosotros que nos acompañaran, hasta que nos llegue la tarde, pienso que es

una forma de honrar de dónde venimos, ya sea de forma consciente o

inconscientemente, pero ahí están no hay forma de negarlos, siempre estarán

presentes en nosotros.

Recordando a la negrita, estando en Oaxaca, México me sirvieron unas caraotas

negras y pedí azúcar para ponerle, todas mis amigas extrañadas, esto lo aprendí

de mi mamá, cosa que no aprendieron mis hijas de mí, ellas no le ponen azúcar a

sus caraotas.

Reflexionando cuanto marcamos a nuestros hijos, sin estar yo en los Estados

Unidos, veo que mis respectivas hijas han decorado sus casas de forma

moderna, sin embargo, en sus decoraciones está presente mi huella en los

materiales utilizados. En hora buena, a enaltecer de dónde venimos hoy mañana y

siempre.

Y nos volvimos ellos por Angel Ceballos

 "Y nos volvimos ellos" (por, Angel Ceballos – octubre 2024)


Mis lápices reflexivos, ¡excelente y motivante elección del título del tema del mes,

que no deja de ser poético! "Y nos volvimos ellos" de “Alberto Luis Borges” .

¿Les ha pasado que ves a sus papás o sus mamás y dices "¡Soy igualito a él

o a ella"?.

Pues, en mi larga vida, esperando sea longeva, como la de “Tirro” que estudia el

cómo lograrlo, me ha pasado lo mismo. Me he dado cuenta, de que, a pesar de no

haber conocido a mis abuelos, por parte de mi padre y solo una abuelita materna

por poco tiempo, he heredado gestos, actitudes y formas de pensar de mi progenitor

y hasta algunas frases “coloquiales” de quien hoy tuviera 110 primaveras.

¿Cómo es que pasa esto?.

Bueno, según los expertos, es como un efecto dominó. Nuestros padres me

criaron, me transmitieron valores y junto con ellos, sus costumbres y hasta sus

olores. Sus legados genéticos, sin darme cuenta, acabaron repitiendo en mi,

muchos de sus patrones. Es como si nuestros genes y nuestras experiencias de

vida se mezclaran y crearan una especie de "receta familiar o ensalada de frutas",

donde cada ingrediente tienen su propio valor.

Aceptar a nuestros padres tal como son, con sus fortalezas y limitaciones, es un paso

fundamental para reconciliarnos con nuestro pasado y construir relaciones más

saludables. Honrarlos, implica reconocer su influencia en nuestra vida y agradecerles

lo que somos, lo que es un acto de amor por todo lo que nos han dado y “Hasta lo que

somos de lo que no queremos ser”

Hoy mis hijas y mi esposa se dan cuenta de esto cuando me ven haciendo cosas y

exclaman, ¡Mira a Angel María” (su nombre), ¡“Habló Angel María”!, es como si

estuviera viendo una película en repetición! . Y no solo eso, sino que, hasta mi nieto

mayor hoy con 25 años, repite asombrosamente gestos o movimientos heredado de

su bisabuelo. Mas de una vez he oído a su madre, gritarle, ¡“Angel María” no

hagas eso así!

¿Volvernos ellos es malo?, para nada. De hecho, hoy con mis conocimientos

y relaciones con mi familia, amigos y semejantes, reconozco que es algo

completamente normal y hasta positivo. El reconocer que, al heredar ciertas

características de nuestros padres, podemos entender mejor quiénes somos y por

qué actuamos de cierta manera y hasta saber por qué duró tantos años fiel con mi

madre, no siendo él una “perita en dulce”. Además, nos permite valorar y agradecer

todo lo que ellos me dieron como aprendizaje.

Lo importante y pienso, es no quedarse atascado en el pasado. Si hay cosas

que no nos gustaron de nuestros padres, aprendimos mucho de ellas para elegir un

camino consciente y diferente porque sabemos que otros caminos no eran lo

pertinente. Pero siempre hay que recordar que somos el resultado de una

combinación de genes, ambiente y experiencias, y que nuestros padres son un “hilo

conductor” importante de nuestra historia.

El tema poético de Alberto, me ayudó a reflexionar y a reafirmar sobre la importancia

de la familia y cómo nuestras raíces influyen en quienes somos. Y nos recuerda que,

aunque seamos únicos, también somos parte de algo más grande: nuestra familia.

Sin conocer con detalles los estudios de la “Tirro” sobre el tema, pienso que el

“volvernos ellos” es un proceso natural de identificación, aceptación y

transformación en relación con nuestros ascendientes y es un patrón muy común

en los seres humanos. Es una parte fundamental de nuestro desarrollo psicológico

y espiritual. Eso no tiene precio y él me debe estar escuchando. ¡Por eso, “Té pido

la bendición - Te quiero papa” y siento que desde donde estes me estas

iluminando! para reencontrarnos algún día y formar un “Dúo dinámico de

trascendencia”.

y nos volvimos ellos

 

Octubre, 19, 2024

Y nos volvimos ellos

 

Siendo muy joven, y ya graduado de arquitecto, entré a trabajar en en un taller de arquitectura que dirigía un muy afamado profesional. Participé en una competición, en lo que nos medíamos tres recién graduados. El objetivo de mi futuro jefe era completar con gente joven, su equipo de trabajo que habría de estar responsabilizado de la remodelación de una gran torre de oficinas; las mas alta de Caracas en los años ochenta. Yo gané.

Y ganar se trataba de realizar un aprendizaje apurado de todo lo que se requería para hacer bien mi trabajo. Era una oficina pequeña ubicada en el último piso de un edificio que él había recibido en herencia. Éramos pocos también, solo 8 personas, con la secretaria. La oficina tenía igual número de cubículos que de profesionales. Como era un taller de arquitectura, de los 8, 5 éramos arquitectos.

            Cuando se es joven y sin experiencia, uno se mira a sí mismo como una esponja, que absorbe todo lo que ve, escucha y hace, Además, era un sitio para aprender pues de había encargado de contar con una “orquesta que sonaba muy armónica junta” Y resulta que justo hoy, me llamaron para que les contara historias vividas durante la construcción del edificio. (Van a editar un libro)

 -Háblame de Martín me preguntaron, y no tardó mucho en venir a mi cabeza la historia que narro a continuación y que tiene que ver con las decisiones que tomamos, con respecto a las cosas que conocemos y se hacen parte de nosotros;

Recién comencé a trabajar, mi jefe solía invitarme a almorzar. Era muy amable y una de esas veces me dijo que estaba contento con mi trabajo y que además había superado la trampa del “mensaje a García” que ocurre cuando realmente comenzamos a volvernos otros; ya sean jefes, padres, hijos, parejas o amigos.

Un día me dijo, “te voy a contar que vas a aprender de nosotros como un mejor profesional” Y así empezó, -de Manrique, que no es Arquitecto, pero sabe más que si lo fuera, vas a aprender del poder de hacer parejas. Se llama “maridaje” entre materiales, de como se junta el acero y el concreto, las baldosas y los frisos, la madera y los vidrios. -Uhhmm, todo tiene que ver con el respeto a cada material y de como se comporta, pensé. Siguió, -De mi hijo vas a aprender el poder que tiene el conocer a las personas y de cómo se relacionan con el logro de objetivos. También se trata de el estudio y conocimiento de la cultura y la gente con la que convivimos. -Uhmm, el poder del otro en la relación. El poder de la escucha y de las raíces.

De Carlos, que es el mejor manejador de la inteligencia espacial, vas a aprender a imaginarte las soluciones integradas, antes de intentarlo. El tiene desarrollado los dos lados del cerebro y es capaz de anticipar problemas y proponer soluciones. Es capaz de dibujar el mundo con la mirada del otro cuando lo escuches decir, “Dibujando para ti”… Y lo pensaba en el poder que tiene anticiparse a las soluciones con tan solo poder crearlas en tu cabeza. Y por último me dijo, -y de mi vas a aprender de mis “canas”- y me señaló con el dedo índice de su mano derecha, su cabello platinado por los años. -Se trata también de poder trabajar con todos a la vez, en el mejor esfuerzo voluntario, para el logro del mejor producto.

Con todo eso y haciendo un trabajo que amaba, con una mentalidad de esponja, y en el paso de los años, fue que un día me dije: -¡soy ellos, tengo lo mejor de cada uno!- , y es así como decidí trabajar para ser el mejor con lo mejor de cada uno.

 Hoy, es esa reunión, una de las dueñas del edificio en cuestión, al hablar de su casa dijo que es la mejor obra de construcción que haya conocido. Y la hice yo.

Así, podemos crecer y ser lo mejor de nuestros padres, o de nuestros hijos o de nuestros amigos. El poder de ser mejor vive en lo de ellos, que viven en nosotros

 

Alberto

sábado, 19 de octubre de 2024

MEMORIA DE MIS ARRUGAS

 

MEMORIA DE MIS ARRUGAS

 

Las arrugas son un libro abierto

Las arrugas son cuadernos de extrañas hojas,

donde vamos escribiendo historias

Las arrugas son surcos en el cuerpo

Abismos sabios en el alma

Las arrugas interpelan mi lejana lozanía

Tiñen mi cuerpo de sombras

Marcan surcos de gesto acumulado

 

Las arrugas no se planchan

Se arrugan como globos huecos

Se vacían en historias fraudulentas

Las arrugas me recuerdan

Que de tanto ser como ellos, no he sido

Que de tanto cuestionarlos,

termino hablando en los pliegues de sus bocas

 

He cruzado de oriente a occidente

A desplegar las comisuras de sus labios,

en ellos duermen silencios hechos flecos

He caminado de norte a sur

Hurgando atisbos en los surcos de sus ojos,

en ellos solo duermen sueños secos

 

Mi largo viaje por las arrugas

Me lleva por caminos que son líneas

Se van haciendo canales

Se van haciendo pliegues

Se van haciendo libros de lectura honda

 

No encuentro mis arrugas

En tus arrugas de mis tiempos…

 

 

Gudelia Cavero Hurtado

sábado, 5 de octubre de 2024

CEC. Tema de Octubre 2024

 CEC

Tema de Octubre 2024

"Y nos volvimos ellos"

Host: Don Alberto

Fecha: Sábado 19 de octubre 2024

Hora: 10 am

Zoom/Meet


Este tema se nos presenta con varias aristas. La primera, el vernos como furon nuestros padres a la edad actual, y que camino recorremos: aceptar, honrar, borrar, cambiar, ser feliz. Es un poco como aceptamos lo que nos pasa.

Es un tema para honrar la incorporación de Vicky en Soveppos, (que tanto ha estudiado el tema),  por una parte, y a que nos hagamos concientes y responsables con el ciclo evolutivo, con uno o con otros. (Ambos, mejor)

Las otras aristas pueden transitar el tema político, los aprendizajes de lo maestros e incluso, como cambiamos dando clase a jóvenes que recien empiezan la universidad. Un día, me vi tostando pan y cortándolo en pedacitos y creando un aperitivo distinto en cada bocado. De ahí viene la creatividad como fortaleza. También es un tema cultural, al final nos convertimos en lo que todos somos (o no)

En fin, esta es una oportunidad de recordar y horar, y hacerlo a lo interno en el proceso. Aceptar el origen, ¿tiene que ver con florecer?


sábado, 28 de septiembre de 2024

El poder y la magia de un encuentro/Angel Ceballos

 EL PODER Y LA MAGIA DE UN ENCUENTRO (Angel Ceballos) – 28/9/2024

Cada encuentro tiene un significado especial en nuestras vidas.Nos abre la oportunidad de sentir y potenciar nuestras cuatro dimensiones que conforman nuestra alma: lafísica, mental, emocional y espiritual. Cada conexión tiene su contexto y sin darnos cuenta, nos cataliza la vida, nos energiza y nos hace más humanos y florecientes.

 

MI SIGNIFICADO APRECIATIVO

Hoy quiero compartir con mis lápices positivos,una vivencia en mis espacios de conexión, llamados *“ENCUENTROS”*, practicados en mi cuarta etapa existencial (75+, según D. Chopra) y que seguro ustedes también han experimentado con su propia connotación.

Como todos ustedes sabrán, tengo ya diez meses en la búsqueda de mi residencia en el imperio americano donde, desde hace más de veinte años, viven mis tres hijas, lejos entre sí, bien casadas, con siete nietos (2-3-2) en pleno crecimiento y desarrollo personal, el mayor 26 primaveras y casado y la menor 18.

Lograr reunir a toda la familia nuclear, actualmente 16 almas, aunque sea una vez al año, para agradecer a Dios la fortuna de estar todos saludables, realizados y con ganas de *“crecer con permiso”*, se había convertido en una gran ilusión por momentos irrealizable.

 

¡Y el 4 de julio de este año, fiesta patria en el imperio, se hizo realidad!*

 

Tuvimos la oportunidad de coincidir en Saint Point, Idaho, estado paradisiaco pegadito al Canadá en un encuentro con *“toda la familia nuclear”*, además de esposas y novias de algunos de los nietos (18 almas en total). ¡Mucho con demasiado verdad?!

Ante tal acontecimiento, quiero compartir con ustedes el significado de esos días que me llenaron de orgullo, alegría y gratitud, y me liberaron de inquietudes al ver en vivo nuestra cosecha directa de *tres seres especiales llenos de dones, fortalezas y riqueza interior, todas madres, esposas, profesionales y además buenas personas llenas de bondad*.

Pude apreciar el impacto positivo de este encuentro en todas la dimensiones del ser:

 

• *En la física*, reunirme cara a cara permitió que, mediante esas miradas con energía brillante, se lograrán conexiones significativas, cuyos ojos iluminaban todo mi ser.

• *En lo social*; el poder compartir sensaciones emocionales y corporales en todas las direcciones (en este caso imprevisibles).

• *En lo emocional*, sentir una profunda conexión *“mente-corazón-espíritu”*con cada ser del frondoso árbol genealógico Ceballos-Rosales.

• *En lo mental-intelectual*, poder conocer lo que cada miembro de la familia estaba haciendo y hasta debatir el significado de por qué eligieron esos caminos de aprendizaje.

• *Y en lo espiritual*, considerar esta experiencia, junto a una naturaleza esplendorosa de testigo, y un momento de conexión con algo más grande que nosotros mismos. *Creo que sin querer queriendo esta dimensión lo definió TODO*. *¿Se puede pedir más?*

 

En este encuentro sorpresivo para mí, pero tan anhelado, tuve la dicha de poder conversar con mis nietos, tanto individualmente como en grupo. Como seres únicos que son, correspondieron en general a mis expectativas de alimentar mi espíritu. El escuchar varias veces la frase *“te quiero mucho, abuelo”* me inoculó el efecto de una droga alucinógena.

Fueron momentos transformadores, que validaron mi perspectiva de lo que es una familia, y yo diría que también desafiante, pues me permitió medir el crecimiento de lo que sembré junto a mi compañera de viaje, 58 años atrás.

Ver a mis hijas más unidas que nunca. Confirmar que existe una amalgama “física-emocional”, no casual, sino construida en el tiempo. Ver que en sus vidas cotidianas hay contacto y están pendientes de sus vivencias y experiencias significativas, es un regalo que no tiene precio y eso ha dejado una huella imborrable y mágica en mi memoria.

De todas las preguntas que me surgieron en este encuentro, pudiera destacar esta: *¿Significó el encuentro un regalo de bienvenida a la familia Ceballos-Rosales?*Siento que mis tres hijas nos ofrecieron un cálido recibimiento a sus *“panas”* de gestación que llegaban a otro país para esperar el llamado del gran Dios, cuando él lo disponga.

El lugar, por demás paradisiaco y de colección – el chalet de una de las hijas a orillas del lago Pend Oreille – fue un escenario de antología, donde los árboles, el aire, el cielo, el sol y el agua cristalina, conformaron una fuente de elementos cósmicos que me dieron aliento de vida. Una tierra fértil y extensa que reitera que no importa dónde echamos raíces, sino que se traduce como un "todo”, *¡una obra de arte!¨*

Saint Point me recordó el poder de un imán, que une muchos elementos por la dualidad de sus fuerzas opositoras. Déjenme decirles que yo sentí una atracción genuina y efectiva entre seres maravillosamente diferentes

La fluidez de emociones y una actitud de apertura fueron lo central durante esos cinco días. Esto me hizo reafirmar que somos *“chi” en acción*, cuyo estímulo lo despiertan las emociones, que surgen sin buscarlas. Somos un ser dividido en varios sujetos con autoconocimiento, aprendizaje y muchos ideales cumplidos y por cumplir. Las barreras se disipan y la energía fluye sin resistencia, porque no puede haber resistencia cuando hay *AMOR*.

A lsurgir la pregunta de *¿Qué oportunidades descubrí en este encuentro?*, la respuesta no se hizo esperar:

•La oportunidad de un crecimiento personal instantáneo*, al potenciar el autoconocimiento*, pues juntos valoramos nuestras fortalezas, miedos y deseos.

•La oportunidad de aprender*, al instruirnos o potenciar nuevas habilidades y perspectivas.

• La oportunidad de expandir nuestros límites*, ya que este tipo de encuentros pueden desafiarnos a salir de nuestra zona de confort.

 

Pero para mí lo central fue la conexión profunda, que se genera con el reinicio o fortalecimiento del amor que nos conecta y nos da un mayor sentido de pertenencia.

 

Todo esto, se traduce en aprendizaje y sabiduría al interactuar con personas de diferentes experiencias que pueden ampliar la visión del mundo.

Al final, solo me toca expresar que este *encuentro fue una chispa mágica* que encendió algo dentro de mí y que me motiva a escribir sobre el significado de todos los encuentros que tenga y espero tener con mi gran familia ya inmortal *¿Será como tener a Dios y al Amor juntos en el corazón y la consciencia?.*

 

¡La magia de un encuentro es una realidad si uno lo crea!

viernes, 27 de septiembre de 2024

La magia de encontrarnos en Madrid/ Maria Elena Garassini

 LA MAGIA DE  ENCONTRARNOS EN MADRID

María Elena Garassini

 

En la capital de la madre patria, donde todo huele a bocadillo de jamón serrano, programamos el encuentro de dos parejas, y una amiga, que se entienden con apenas mirarse, sonreírse… pero que tenían varios años con una separación física trasatlántica.

La bajada del avión fue como de costumbre, después de muchas horas de vuelo. El cuerpo destilaba cansancio y muchas ganas de llegar. Los asientos, en la parte intermedia del avión, nos recordaban que no seríamos los primeros, pero tampoco los últimos en salir ; ) Avizoramos ya la puerta, caminamos por los pasillos, llegamos a Migración , bendito sea, la cola no es tan larga, salimos, recogimos las maletas y en la puerta de salida nos esperan dos caras sonrientes. Desde ese momento supimos que la magia de los encuentros iba a cobrar vida en la siguiente semana.. y así fue.

Abrazos iban y venían, y después, un pequeño papel desplegado nos ofrecía los posibles itinerarios de lugares que “no nos podíamos perder”. Lo socializamos, y sentimos que la amistad había sido la musa para la propuesta de esos lugares.Recibimos aquel papelito como un tesoro y fue nuestro mejor compañero durante la semana.

De camino al carro, para llevarnos al lugar de nuestro hospedaje, que también nos esperaba con mucho cariño, puesto que una nativa de la madre patria, amiga entrañable, nos esperaba con jamón serrano, baguet y vinito para celebrar la llegada y ponernos al día. Abrazos fueron y vinieron, cuentos, recuerdos y anécdota también.

Toda la semana transcurrió en un intercambio maravilloso con estos tres amigos fenomenales, la pareja y la amiga, que nos pasearon por monumentos, plazas, museos, cafés, bares, cuchitriles y restaurantes.

En la magia de este encuentro con estos tres seres maravillosos, también hubo un momento de magia de pareja.  En una plaza que está en los jardines Sabatini, invitaban a las personas que quisieran bailar con las escenas más icónicas de las películas de todos los tiempos. Con mucha curiosidad nos fuimos los dos a participar en esa peculiar invitación. Al llegar encontramos una multitud entusiasta de parejas que, sonrientes esperaban el inicio de la proyección de las escenas de las películas. A la hora en punto se dio inicio a la actividad, y se armó la fiesta, a la cual nos unimos con la misma alegría del resto. Eso sí, de lejos, teníamos 30 años menos que la pareja más joven del grupo ;)  En retrospectiva, ha sido una de las actividades en pareja más divertida en la que hemos participado, había una alegría contagiosa que percoló por toda la audiencia.

La despedida con nuestros tres amigos coronó la inigualable jornada. Nos encontramos para almorzar bocadillos de calamar con una clara en la plaza de Sol, hablando, riéndonos y saboreando lo vivido.Había sido una semana mágica, de mágicos momentos y vivenciasque no solo no olvidaríamos, sino que, como hoy, sería motivo de muchas anécdotas y recuerdos maravillosos.

Como es usual en mucho de mis escritos del Club de escribidores, finalizo dando gracias a la vida que me ha dado tanto…

 

la magia del encuentro: Amistad

 La magia del encuentro,

Vivimos. Transitamos por la vida: por la nuestra, y junto a otros. La vida suele presentarse justo como un encuentro, reconociéndonos, y aceptando a otros en nuestras vidas. La amistad, por cierto, puede ser una posibilidad mágica, que, como crisol, mezclan almas; aquellas más vulnerables, indelebles, y suficientes. Llegamos, como decía una profesora, cuando más nos necesitan, pero yo agregué también, que es cuando más los necesitamos.

Entendemos que, en el arte de acompañar a otros nos suceda, y veamos que llegan a mostrarnos cosas que no hemos visto aún. Y ocurre de muchas maneras; en soledad, cuando un día sin planearlo, nos vemos en los ojos de quién encontramos  en el espejo, y nos convertimos en nuestro mejor amigo. También, en la magia del encuentro, lo vemos en iguales, entre géneros, entre disímiles en edad y creencias, entre pocos, o entre muchos, y con Dios. Este último, nos mandó a su hijo para que tuviéramos un encuentro de amistad fraternal espiritual.

La amistad llega por azar, por admiración, por perseverancia, o por ser incluso, inevitable. “Son dos cuerpos y una sola alma”, dijo un sabio. Un día nos damos cuenta que amor y amistad, tienen el mismo origen de la palabra, y que ambas pudieran ocurrir sin intimidad. Es así, como entendemos el verdadero sentido de la amistad. La verdad es que nunca llegamos a saber todo acerca del otro o de los otros; solo, lo que nos integra, pertenece, nos protege o alimentamos. Las otras certezas habitan en el otro o en los otros, y no son, definitivamente, algún sujeto de la verdad. Lo que observamos es, solo magia.

 

Alberto

La magia del encuentro/Tema de septiembre 2024/CEC

 


CEC

Tema : La magia del encuentro

Host: Don Angel

sábado 28 de septiembre de 2024

10:00 am

Zoom


LAS CASAS DE MI EXILIO

 

LAS CASAS DE MI EXILIO

 

Salgo de mi casa en estampida

A buscar el abrigo de otras casas

Salgo de mis tibias sábanas

A buscar sábanas frías

Salgo de mi cuerpo

a vestirme en otros cuerpos

Salgo de mi suelo

a cobijarme en otros cielos

Salgo de mi vida

a vivir la vida de otras vidas

 

Las casas que abrigaron mi exilio

Encendieron chimeneas del amor solvente

Tendieron mantas para mi llanto

Fueron espejo cribando mis sentimientos

 

Las casas de mi exilio

Fueron nidos de sábanas blancas

Llenaron de potajes mi plato vacío

Saciaron mi sombra hambrienta

 

Las casas de mis encuentros

Encendieron sus brazos a mi escucha

Abrazaron mi ansiedad y mi tormento

Cobijaron el hogar de mi cuerpo vacío

 

Las casas de mis encuentros

Tendieron las mejores camas,

para mis astillados sueños,

para mis noches tiritando en insomnios

 

Las casas de mis encuentros

Se vistieron de verde terciopelo

De lunas y mares estrellados

De cielos en atardeceres de asombro

De idiomas parcos y porosos, mustios e imprecisos

 

Sigo trajinando por las casas que me cobijan

Sigo apostillando recuerdos

Con la tinta roja del amor que nos yergue

Sigo construyendo la paz de mi elemento

La savia para tiempos inclementes.

Gudelia Cavero Hurtado

sábado, 31 de agosto de 2024

ÚLTIMA CONVERSACIÓN

Autor: Martín A. Fernández Ch.

Fecha de publicación: 28/08/2024

Al pie de un arbusto, resguardado en una morada con forma de cueva hecha con ramas secas, plantado en la ladera rocosa de la montaña, frente al mar de la costa de Carmen de Uria, se encontraba un viejo pelícano, su plumaje estaba descolorido y despeinado, sus ojos eran grises debido a su larga edad que ya pasaba los 60 años, superando la longevidad natural de esa especie de ave. Estaba moribundo, acompañado por su pareja de vida y con un par de amigos de la infancia.

─Mi amor, me siento muy débil ─dijo Pelícano.


─Respira con calma, te sentirás aliviado si te tomas este brebaje que te preparé ─dijo su amada, tratando de animarlo, pero temiendo por ese momento ineludible como es el último suspiro de la vida.

─Amigo mío, no te vamos a abandonar, aquí estaremos para acompañarte ─dijo uno de sus compañeros que allí se encontraban.

Estaban tristes, aunque entendían que, lo que le estaba pasando a Pelícano, eso formaba parte de la vida y que, a todos, en algún momento también les llegaría. Sentían el gran deber de estar con su gran amigo hasta su último aliento, pues han sido muchos años de aventuras, compartiendo alegrías y tristezas.

─¿Te acuerdas cuando, todo emocionado, a toda velocidad te lanzaste en picada al agua por un pez, pero un tiburón se te adelantó? ¡Te enfureciste! Y, como un loco, ¡empezaste a picotearlo! Hasta que esa gran criatura te enseñó quien era el rey de los mares, enseñando sus fauces y brincando hacia ti, tan alto que casi te agarra ─dijo Pelícano a su amigo, con una leve carcajada.

─¡Qué va! Los tiburones son criaturas torpes. Además, tú sabes que fui campeón acrobático y era la atracción principal del circo de “Los Hermanos Valentinos” ─dijo el amigo, inflando su pecho y presumiendo delante de todos.

─¡La verdad es que eres un exagerado y un tremendo cobero! En ese circo tu trabajaste de asistente del mago, porque la atracción eran esos hermanos, haciendo acrobacias con sus motos dentro de una esfera metálica. Además, luego que te salvaste de ese tiburón, fue tanto el miedo que agarraste que estuviste una semana si entrar al agua. Y nosotros tuvimos que llevarte comida para que no murieras de inanición. Eras y sigues siendo un echón y, peor aún, un quemado ─dijo el otro amigo en tono burlón, haciendo que todos los que estaban en el recinto se rieran a carcajadas.

─¡Mi amor no te rías tanto, que estas muy frágil! ─dijo su amada, preocupada por su condición.

─No te angusties mi amor, que la risa me reconforta, momentos como estos son los que valoro y extraño: estar con mis amigos y recordar las anécdotas vividas ─dijo Pelícano, quien mostraba un mejor semblante, aunque fue solo por un instante. ─¿Esos que están en la orilla de la playa son Delfina Guacamaya y Mantarraya Azulejo? ─dijo, en un pequeño instante que logró afinar su vista, mostrando una sonrisa, pero que se en seguida se transformó en tristeza, porque no tenía la fuerza para volar y saludarlos.

A Pelícano ya le era difícil respirar, sus pestañeos se hacían más lentos y sus pupilas se estaban dilatando. De manera sorpresiva, aterriza a su frente una blanca Pelícano, envuelta con una luz brillante, haciendo que, en vez de sorprenderlo, más bien se sintió en una paz indescriptible.

─Madre, estas hermosa. ¿Qué haces aquí? No imaginé verte de nuevo ─dijo Pelícano, mientras escuchaba un lejano llanto desgarrador y las leves voces tristes de sus amigos despidiéndose.

─Hijo mío, vine a acompañarte en este nuevo vuelo. No te asustes, pero vendrá a buscarte el Ángel Negro para llevarte al mundo de los espíritus ─dijo su madre, mientras le daba un abrazo amoroso, como cuando pequeño.

En ese mismo instante, llega un negro pelícano, con su plumaje azabache brillante y con largas alas. Sus uñas eran largas y del mismo color. En su cabeza, las plumas las tenía erizada. Si bien parecía algo tenebroso, Pelícano no le temía, porque sentía que se trataba de un ser especial.

─Pelícano, llegó el momento de que vayas al mundo de los espíritus. Has obrado bien, por eso, Dios te quiere en su reino, en el paraíso. Si bien tu madre ha abogado por ti, no fue necesario, porque Dios te ama y te quiere a tu lado y pronto tendrás la oportunidad de la resurrección, o bien como pelícano nuevamente o como otra criatura si así lo deseas ─dijo el Ángel Negro, quien tenía una voz glamorosa y que influenciaba tranquilidad plena a Pelícano.

─Preferiría ser un pelícano de nuevo, porque fue muy placentero haberlo sido ─dijo Pelícano, con voz pausada y amable, haciendo una reverencia ante el Ángel Negro.

Los tres: Pelícano, su Madre y el Ángel Negro, tomaron vuelo en dirección al cielo. Él logró ver con claridad a sus entrañables amigos de aventuras cuando su naufragio en el mar: Delfina Guacamaya y Mantarraya Azulejo, quienes se encontraban cerca de la playa velando su partida. Pero lo que más le alegró fue verlos con sus respectivas parejas y sus hijos, jugando juntos con alegría y amor. Logró ver a sus amigos haciendo espectaculares piruetas en el aire, como si hubieran sentido que él estaba sobre ellos viéndolos, haciéndole una fiesta de despedida.




FIN



 

sábado, 24 de agosto de 2024

La voz de Gude/Gudelia Cavero

 La voz de Gude. 

Desde Alemania,


Está en mi drive. Si me escribes a alindnerb@gmail.com te mando el link 


Feliz día,


Alberto

El tema de Lila, la Host/Lila Vega

 "Las rabias, tristezas o aburrimientos que me ayudaron a crecer"

No tengo remedio.  Hasta lo irremediablemente malo tiene su lado bueno y yo siempre lo encuentro.  No, no es negación.  Es la necesidad de que la vida tenga sentido, que la mía tenga propósito.  

Confieso que las tristezas que tolero mejor son aquellas que hay que aceptar sin discusión, las que son  irreversibles.  Para todas las demás, discuto, cuestiono, trato de cambiar la realidad. Pero la muerte no tiene remedio.  No puedes explicarle a la persona muerta  que no es buena idea que se muera, que reconsidere, que es la mayor de tus alegrías, que te despiertas todos los días para verlo sonreír y dejarte abrazar.  

Pero lo malo pasa y lo aceptas y entiendes que estás herido y que necesitas cuidarte.  Te echas en tu cama y no haces nada.  Duermes, lloras, comes poco y ahorras energía.
Y tu cerebro va pensando cómo sigue con la vida.  ¿Cómo te adaptas a esta herida que necesariamente dejará una cicatriz? No vas a ser la misma persona.  Lloras mucho y te condueles de ti mismo.  

Pero finalmente encuentras tu nuevo espacio, tus nuevos proyectos, tus nuevos propósitos y un nuevo sentido para tu vida.  

Cuando miras atrás, te maravilla lo que lograste, no sin sentir cierta ambivalencia. Ese logro viene de la adversidad, de haber perdido a una persona amada, pero creciste. Y das las gracias por lo que aprendiste. Y recuerdas amorosamente lo que ya no tienes.