Cuando me encontré con el Niño
Jesús – Santiago Porras Rojas
Encontrar
al Niño Jesús tiene tela para contar sobre encuentros con el Niño Jesús, en mi
infancia y como adulto.
En mi
casa, ya desde el 18 de noviembre, por allá en 1964 mi papá traía unas cajas de
cartón, donde estabantoda la iconografía de una Belén,donde las figuras mas
grandes eran: un establo, la mula y el buey, los 3 reyes magos, el Ángel, la Virgen
María, San José, la Estrella de Belén, el pesebre y el Niño Jesús.
De
tal forma que el primer encuentro fue en una caja, posiblemente de Ajax. Allí
encontré al Niño Jesús y lo seguimos encontrando cada noviembre en alguna caja
de cartón.
En el
nacimiento no colocaban al Niño Jesús, pues lo esperábamos para la media noche
del 24 de diciembre, quien debía aparecer en el pesebre el día 25 que es
Navidad.
En
cuanto al encuentro había algunas circunstancias exigentes para el niño que yo
era, especialmente, respecto a pedir considerando que traeríasólo lo que pudiera.
Además, debía dormirme para que el Niño Jesús viniera, al parecer la idea era
no encontrarme con él mientras me colocaba los regalos alrededor del nacimiento.
Así
al levantarme, mi encuentro con el Niño Jesús lo representaba un regalo. Mi
felicidad estaba en haber encontrado un juguete anhelado, juntos con otros que
eran como una especie de “ñapa”. Confiaba en que ese regalo me dejaba saber que
él sabía quien era yo y el regalo era la manera de saber de él.
En
una segunda etapa, las tradiciones alrededor del encuentro con el Niño Jesús;
sin ser consciente de ello, empezaron a contagiarme de tal manera que,
encontrarme con él me invitaba a conectar con el canto de aguinaldos. El
significado del encuentro, en esta oportunidad era hacerme parte de una
preparación, de una integración con otros a fin de llegar alegres al día de navidad.
Al
estar aprendiendo a tocar el cuatro venezolano, nos entusiasmó crear un
conjunto aguinalderoentre mi hermana Elisa y mis primos Pascual y Andrés, que
llamamos “Los Cañoneros”. Hicimos nuestro “Logo” redondo con cartulina azul
claro, donde coloreamosun cañón haciendo “Pum” que nos lo colocábamos con un
ganchillo en una franela blanca. El repertorio era único, de una sola pieza
parrandera, el aguinaldo “Fuego al Cañón”.Recibimos muchos aplausos y
peticiones (Bis), luego incluimos “Niño Lindo”. En verdad que el Niño, aunque
no lo encontrara ya estaba allí en mis ilusiones.
De
camino entre la niñez y la juventud, Tuve un encuentro con el Niño Jesús en vísperas
del día de Reyes junto con papá, quien debía realizar un trabajo en la ciudad
de Valencia (Carabobo). En las calles había mucha gente y muchos buhoneros
vendiendo de todo, mi papá me invitó a pasear por la feriadonde me atrajeron
los juguetes, en especial un revolver cañón corto Smith Wesson 38 con sus balines
de pólvora. La compra no se realizó, papá dijo “es muy caro”. Volvimos a la
habitación del hotel, y mencionó que se le olvidó comparar una cajetilla de cigarrillos.
-Anda
a la cama y duérmete, mientras yo voy un momentico a comprar cigarros.
Obediente,
me acosté y cerré los ojos, y no podía dormirme. Cuando sentí que regresaba,
cerré mis ojos y fingí dormir. Mi viejo se acercó para verificar que estaba dormido
y al darse la vuelta,entreabrí los ojos y lo veo que toma una bolsa que traía y
sacó una caja con el revolver que colocó al lado de mis botas REX. Entonces
despejé la X y me encontré con un Rey Mago y al mismísimo Niño Jesús.
Nadie
antes me dijo nada de esto, pero lo que me gustó de este engaño venial fue
descubrir que yo también podía ser el Niño Jesús o un Rey Mago. La
representación fue en conjunto, trabajamos en equipo mi hermana y primos y,
como los reyes magos, un año mas tarde les dejamos a nuestros padres y tíosal pie
del nacimiento, unos chocolates y unas frutas que encontramos en la cocina para
que se sorprendieran al regresar del cine.
Poco
a poco comprendí que el Niño Jesús, se hizo grande y que todos los años nacía,
volvía a morir y resucitar. Entonces encontrarmecon el Niño Jesús empezó a darle
forma a una tradición vinculada con las virtudes humanas, entre las que
destacan otras fortalezas atemporales con las que alcanzamos a sostener una
convivencia fraternal y darle un nuevo significado a mi vida y nuestras vidas;
es decir, todos poseemos la cualidad para encontrar al Niño Jesús en otros y
ser encontrados por el Niño Jesús.
También
en ocasiones para otros podemos haber sido apreciados como el Niño Jesús.
Cuando
nos nace un hijo, un sobrino o un nieto es posible experimentar ese encuentro
milagroso con la esencia de la humanidad; la ternura hecha carne y hueso.
Cuando ante las adversidades, perdidas o desdichas conseguimos empatía,
compasión o solidaridad hay la certeza del encuentro con el Niño Jesús. En
momentos de compartir intereses, actividades o celebraciones allí nos
encontramos con el Niño Jesús
Encontrarme
con el Niño Jesús,es este instante en el que la Navidad
Es
Tu nombre
Allí habita para nosotros
El significado delencuentro
Que genera emociones positivas
Con las que accedemos
A encontrarnos con el Niño Jesús
en Belén
Al compartir palabras y deseos
cada día
Con aprecio al valor
De muchas acciones compasivas y
generosas cargada de bondad
Empatía, misericordia y alegrías.
¡Feliz Navidad¡
2021-2022
¡Feliz Año Nuevo¡
Encontrarse
con el Niño Jesús es una experiencia tan relevante y a menudo hasta
imperceptible, cuando estoy distraído en el mundo material y temporal.
¿Qué
me invita a encontrarme con el Niño Jesús? Creo que cada uno puede encontrar
esa actividad que lo procure.
Cantar
aguinaldos y parrandas para mi es una manera de encontrarme con él y así
ocurrió el pasado domingo, cuando saliendo de un confinamiento mínimo, logré
ser una entre muchas voces que cantamos en concierto de Misa de Gallo a la
Venezolana, dirigidos por el profesor Luís EduardoGaléan. Fue reconfortante, combinar
armonías y voces que anunciaban de la fiesta del encuentro de la divinidad
hecha semejante, y al cantar hacer vibrar a más de un centenar de personas con
la vida compartida en los latidos de todos, hechos uno con motivo de la
Navidad.
Es un
encuentro suculento del que nos alimentamos para celebrar la condición de ser
uno alrededor de la humildad. Allí los hechos dicen más que las mismas
palabras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario