Febrero 2025 - VALOR
Juad Masters
Nuestras vidas están impregnadas de decisiones: cómo responder a esto o aquello, cómo manejar esta situación o aquella, cómo confrontar, solucionar, dividir, unir, ignorar... En fin, todos los días nos confrontamos con la necesidad de tomar miles de decisiones. Y entonces, ¿qué es lo que distingue una decisión bien tomada de una que no lo es? ¿Existe alguna fuerza invisible que nos impulsa a tomar acciones para nuestro bienestar individual y colectivo? Para mí, esa fuerza invisible es lo que llamamos valor.
Valor, es de lo que nos toca llenarnos para tomar las decisiones más contundentes de nuestras vidas… Decisiones que, en su concatenación, van trazando poco a poco cada capítulo de la historia de nuestra vida. El decidir compartir esa merienda que tanto nos gusta con un compañero de clase, incluir al niño nuevo en nuestro juego, dedicarle tiempo a estudiar, entrenar o practicar, versus salir con nuestros amigos, elegir una carrera para estudiar, aceptar un trabajo, permitirnos enamorarnos y comprometernos para siempre, o aceptar que quizás esa unión de por vida ya no nos sirve; tener hijos o decidir no tenerlos; reconocer nuestras fallas como padres, hijos, hermanos, amigos o colegas; tomar acciones concretas para ser la mejor persona que podemos ser. Todo esto, y miles de otras decisiones, requieren valor.
¿Y entonces, cómo es que sacamos valor para actuar en cada una de estas circunstancias? La palabra en español nos da la respuesta: contar con el valor para tomar decisiones en pro de nuestro bienestar y el de los demás se basa en alinear esas decisiones con nuestros valores personales, es decir, con aquellas normas o principios influenciados por nuestras creencias, que están moldeadas por nuestras experiencias, cultura, familia y educación. A su vez, nuestros valores forman las actitudes y comportamientos que guían nuestras acciones, nuestra forma de actuar, ser y pensar. En pocas palabras, son nuestros valores los que nos guían a actuar con el valor necesario para vivir de acuerdo con lo que nos es importante, significativo, sagrado y no negociable.
Actuar con valor, es pues, para mí, la manifestación más pura de amor para con nosotros mismos y para aquellos que nos roden en nuestra vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario