Un jardín donde haya verde, azul, amarillo, rosa, rojo, turquesa, naranja, blanco, violeta...
Un jardín donde haya flores, pero también frutos.
Donde siempre haya sol pero nunca falte el agua.
Para sembrar y para cosechar.
Para siempre tener algo que hacer y una razón para levantarme y sonreír cada mañana.
Un jardín para ti y para mi. Y también para ellos: los más cercanos, los más lejanos, los que se fueron, los que no han regresado y los que no han llegado.
Un jardín para que siempre tengamos sombra, cobijo y luz. Dulces aromas y sabores.
Para no olvidar de dónde vengo.
Para agradecer.
Para no ignorar a la esperanza.
Para reírme, para leer, para jugar otra vez.
Para recordar que valió y vale la pena.
Un jardín para que lleguen mejor las ideas.
Para disfrutar del silencio.
Para maravillarnos de la tierra y del cielo, y para que veas las estrellas a mi lado.
Un jardín para estar en el presente y ver de cerca el futuro.
Un jardín para desayunar y para ver el ocaso.
Angela, ese jardín se parece a tí, por no decir que ese jardín, eres tú. Quizás nunca te han dicho que tienes aroma a jardín, pero leyendo tu escrito , lo usaré como piropo porque es sabroso estar contigo, leer, escribir, pensar, crear. |Eres nuestro jardín del club de escribidores|
ResponderEliminarTu amiga
Lele
Gracias queridísima Lele, por ese piropo que recibo con mucho cariño y que guardaré siempre en mi corazón.
EliminarGracias por tu jardín de bellas palabras, gracias por sembrar en nosotros la escritura.
ResponderEliminarMi Super Ángela, ten por seguro que cueste lo que cueste y tarde lo que tarde, tendrás tu jardín de regalo. Ese espacio, tal como lo describes en tus hermosas líneas, te acogerá de nuevo en esta, tu tierra hermosa. Ahora esta en construcción, o digamos en remodelación, pero más temprano que tarde, estará listo para que vengas a sembrar nuevamente tu talento y tus letras. Un gran abrazo.
ResponderEliminarAngela: gracias por tan bella descripción de tu jardín. Seguro que también tendrás allí un espacio para ver retoñar y florecer las semillas de escritura creativa que sembraste en el corazón de cada uno de nosotros, sin fertilizantes, solamente amor como abono y el riego continuo de tus consejos y recomendaciones. Feliz Navidad.
ResponderEliminarQuerida Angela, te veo como jardinera, pero también como una hermosa flor. Gracias por regalarnos tu aroma y la sabia de tus flores...
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